A los 18 años era un auténtico apasionado del Culturismo. Todo comenzó cuando siendo aún un estudiante, perdió al echar un pulso con su amigo. Esto le dolió en el orgullo y decidió acudir a entrenarse a un gimnasio. Llegó al acuerdo de enseñar clases de anatomía al propietario a cambio de entrenamiento físico.
Le encantaba fotografiarse a sí mismo, pero en esa época no existían los selfies. Encontró la forma de hacerse las fotos él solo; cogió un cable y su cámara de fotos y se puso a probar. Después de muchos intentos lo consiguió, había creado la autofoto,lo que ahora llamamos selfie.
Ramón y Cajal realizó una hipnosis con su mujer y recibió una regañina por comprarse un microscopio muy caro llamado Doctor Bacteria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario